27 de julio
Hermolao
Mártir,
c. 400
Durante la persecución de Maximino, mientras se
ocultaba con sus compañeros Hermipo y Hermócrates, veía pasar frente a su refugio al hermoso y noble Pantaleón. Sintiéndose
irresistiblemente atraído, cierto día Hermolao se atrevió a hablarle, lo invitó
al refugio y le contó la historia de un médico que curaba por su sola palabra.
Pantaleón no lo sabía, pero ese médico era Cristo. En cuanto lo supo, se hizo
bautizar y fue ejecutado.
Comparte su día
con Cugat, Juliana y Semproniana, así como con la musulmana Natalia, bella
desconocida de Córdoba que durante el dominio árabe y de acuerdo con su esposo
Aurelio, se dio a conocer dejando caer su velo.
Junto con el
velo cayó su cabeza. Fue en el 852
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